Alianza por el Clima pide el inmediato comienzo del proceso de ratificación del Acuerdo de París en España
Tras la
adopción el pasado mes de diciembre del Acuerdo de París por parte de la
comunidad internacional, el Gobierno español en funciones no ha dado ningún
paso a diferencia de otros países de nuestro entorno como Francia que ya han
comenzado el proceso de ratificación. Este proceso consiste en la incorporación
de los objetivos y principios del Acuerdo de París dentro de la legislación
nacional, de forma que cuando los países que han ratificado este acuerdo
representen al menos el 55% de las emisiones globales el acuerdo de París
entrará en vigor.
Por el
momento ni la Unión Europea ni el Gobierno español han llevado a cabo este
proceso, lo que nos sitúa por detrás de los 27 países que como EE UU o China ya
han depositado sus instrumentos de ratificación ante Naciones Unidas. Por ello,
los integrantes de Alianza por el Clima quieren trasladar al Congreso de los
Diputados las palabras pronunciadas por el presidente de la Comisión Europea,
Jean-Claude Juncker, la pasada semana: "El Acuerdo [de París] debe ser ratificado,
cuanto más esperemos, más corremos el riesgo de convertirnos en el hazmerreir
de todos y de perder crédito en la escena internacional".
Aunque el
Acuerdo de París sea insuficiente para frenar el cambio climático e impulsar un
nuevo modelo basado en las energías renovables y la justicia social y
ambiental, es una señal de los países sobre su compromiso de poner freno al cambio
climático. Sorprende que, a pesar de las declaraciones de todos los grupos
políticos del arco parlamentario sobre la necesidad de tomar medidas, todavía
no se haya dado ninguna iniciativa en este sentido. Teniendo en cuenta el consenso
existente, el hecho de tener un Gobierno en funciones no debería suponer ningún
impedimento político, práctico o legal para ratificar el Acuerdo de París
y así situar a España entre los países que más apoyan su rápida entrada en
vigor.
Los
últimos datos facilitados muestran cómo el Estado español ha aumentado sus
emisiones, lo que arroja como conclusión que estamos lejos de una auténtica
descarbonización de la economía. El Gobierno español debe de ser mucho
más ambicioso, sirva como ejemplo el compromiso sobre los sectores difusos que
situarán las emisiones de gases de efecto invernadero españolas en 2020
por encima de las que se registraban en 1990. Por tanto, es necesario activar
mecanismos legislativos de mitigación de las emisiones, además del desarrollo
de medidas adicionales coherentes con la limitación del incremento de la temperatura
global a 1,5ºC.
Esta
ratificación es el primer paso para el cumplimiento de nuestras obligaciones
como grandes emisores per cápita de gases de efecto invernadero. Alianza por el
Clima espera que el proceso no se detenga ahí sino que con la participación de
la ciudadanía se inicie la imprescindible transformación de todos los sectores
que culmine con una economía descarbonizada en 2050.
Además Alianza por el Clima ha
solicitado al Magrama que convoque próximamente un Consejo Nacional del Clima (CNC)
en el que se aborde de manera participada y consensuada la revisión de las
estrategias nacionales para la reducción de las emisiones en todos los sectores
productivos y la posición del Gobierno español en la próxima Conferencia de
Cambio Climático (COP) de Marrakech, en noviembre. En los últimos años, el CNC
se ha convertido en un órgano de la Administración del Estado con las
Comunidades Autónomas y con las organizaciones sociales en el que apenas se ha
fomentado el debate sobre las grandes decisiones que hay que adoptar en materia
de cambio climático
Alianza por el Clima quiere así contribuir a la transformación de nuestra economía y nuestra sociedad hacia un modelo más justo, más sostenible y más equitativo.