En el contexto de la COP25 se producirán dos movilizaciones mundiales en Santiago de Chile y en Madrid, unas manifestaciones que con una voz única trasladarán que frente a la inacción de los gobiernos las personas estamos dispuestas a plantar cara ante la emergencia climática. En el caso de Madrid, la Marcha por el Clima, convocada por las plataformas Fridays for Future, Alianza por el Clima, Alianza por la Emergencia Climática y 2020 Rebelión por el Clima, Cumbre de los Pueblos, Sociedad Civil por la Acción Climática (SCAC) y Minga Indígena, con el apoyo de cientos de organizaciones internacionales, tendrá lugar el viernes 6 de diciembre. Se iniciará a las 18:00 horas en Atocha y terminará en Nuevos Ministerios con la actuación de Amaral, Macaco, Los Canallas y Thomas Potiron, que junto a voces más jóvenes raperas, cantautoras y flamencas acompañarán la marcha en un emotivo acto final donde tampoco faltará poesía. El alegato correrá a cargo del actor Javier Bardem y la líder indígena Sônia Guajajara. Este miércoles 4 de diciembre se ha presentado en una rueda de prensa en el Espacio de Convergencia de la Cumbre Social por el Clima tanto la Marcha por el Clima del 6 de diciembre como las actividades que se desarrollarán en la propia Cumbre Social por el Clima del 6 al 13 de diciembre. En la mesa han participado Pablo Chamorro (portavoz de Marcha por el Clima), Estefanía González (portavoz de Sociedad Civil por la Acción Climática, SCAC, Chile), Juan Antonio Correa (mapuche lafkenche, coordinador de Minga Indígena, Chile), Ángela Valenzuela (portavoz de Fridays for Future, Santiago de Chile) y Javier Andaluz (participante de las negociaciones en la Zona Azul de la COP25).
Pablo Chamorro ha indicado que se están gestionando hasta 1.300 alojamientos para personas de fuera de Madrid y de la península, así como la llegada de 50 autobuses, al tiempo que ha destacado que la cabecera estará liderada por representantes de los pueblos latinoamericanos. Chamorro ha señalado que la Cumbre Social por el Clima está ahora mismo respaldada por más de 850 colectivos y entidades que se han adherido al llamamiento, y está atravesada por la interseccionalidad desde todas las ópticas. La Cumbre Social por el Clima se está construyendo gracias la cesión de espacios gratuitos, principalmente la Universidad Complutense de Madrid y el Espacio de Convergencia, cedido por UGT en la calle Hortaleza 88, y los gastos se están sufragando con donaciones de muchas organizaciones sociales. Contará con más de 300 talleres, conferencias y espacios de debate. La portavoz de SCAC Chile, Estefanía González, ha destacado que el estallido social chileno ha sido «brutalmente reprimido». «Más de 200 chilenos han perdido sus ojos», ha declarado mientras se tapaba un ojo durante toda su intervención en la rueda de prensa. «Queremos que no se invisibilice lo que ocurre». «El mundo está despertando y como sociedad civil no vamos a parar hasta ver acciones concretas y derechos que tienen que ver con nuestra vida», ha sentenciado . El coordinador de Minga Indígena y mapuche del pueblo lakfenche, Juan Antonio Correa, ha señalado que los indígenas son los «primeros afectados por el cambio climático». Según ha explicado, el objetivo es poner en valor la lucha de los pueblos, frente a la «invisibilización, la tortura, la desaparición». «Solo tenemos esta madre Tierra. Se nos está quemando la casa», ha concluido.
La portavoz de Fridays for Future de Santiago de Chile, Ángela Valenzuela , ha destacado que muchos chilenos están hoy en Madrid para traer la voz de lo que ocurre en el país. «Se supone que la COP25 iba a ser una COP latinoamericana, pero no ha sido así, así que traemos su voz». Estos últimos años han sido «dramáticos», ha expresado haciendo alusión a los informes de la IPCC y los tiempos que dan para actuar antes de que la cambio climático sea irreversible. «Parece una fantasía estar por debajo del 1,5 grados», porque «llevamos más de 25 años y aún así no han logrado poner como prioridad los balances de los ecosistemas del planeta». «Quienes causaron el problema son los países del Norte y las transnacionales, y quienes la sufrimos somos el planeta», ha declarado, para concluir con un «llamamiento a despertar». Javier Andaluz, participante de las negociaciones en la Zona Azul de la COP25, ha afirmado que esta COP «es la última oportunidad para cerrar los compromisos del Acuerdo de París», al tiempo que ha evidenciado que las negociaciones «están muy lejos de cumplir» los objetivos marcados ya que los países «parece que no están dispuestos». Sobre todo, ha hecho hincapié en la «falta de financiación», que tiene que nutrir el fondo de previsión y el del Fondo Verde. Además, ha reivindicado que «frente a su inacción, hay una sociedad civil movilizada para proteger el futuro de todas y todos».